Este año 2018 nuestras Escuelas se encuentran de fiesta. Veinticinco años se cumplen ya desde que se dio inicio a este proyecto, años que, sin lugar a duda alguna, han tenido de dulce y de agraz, pero que gracias al trabajo mancomunado de todos quienes, de una u otra forma, hemos tenido un rol en su desarrollo, han sido enormemente fructíferos.

Hoy podemos afirmar que nuestras queridas Escuelas se encuentran en una etapa de madurez institucional, producto de un trabajo serio, somos reconocidos como una de las principales instituciones a nivel nacional en la enseñanza de la ciencia jurídica, pero esto no es otra cosa que un potente motivo para continuar la senda planteada hasta el momento y consolidar este liderazgo, particularmente en nuestro espacio físico, como lo es la macro zona norte de este país, y, desde esa posición colaborar al debate nacional, aportando tanto nuestros conocimientos técnicos como nuestra particular visión de la realidad con el objetivo de logar soluciones concordantes con la legislación a las coyunturas sociales de nuestro tiempo.

Hago también un especial reconocimiento a todos quienes son actualmente nuestros estudiantes como a los que en cualquier momento hayan pasado por nuestras aulas; nuestros alumnos son nuestra principal razón de ser, es por ello que los invito a superar la visión de dos entes distintos, nuestras Escuelas y su cuerpo de estudiantes son uno solo, de manera que el desafío ahora es trabajar juntos para afianzar nuestro sello, que los valores y principios que inspiran nuestra gestión diaria sean los mismos que muevan a nuestros futuros abogados, porque el conocimiento técnico no es nada si no va acompañado de las herramientas sociales adecuadas que permitan valorar al ser humano en su contexto relacional, con fin último en su consideración como ser racional.

Finalmente el llamado es a reconocernos, a valorar todo aquello que en estos veinticinco años hemos logrado, cómo nos hemos convertido desde una pequeña institución que nacía, cargada de anhelos, a un referente en el ámbito jurídico a nivel nacional, conformando una entidad con características únicas, como es el caso de nuestra de esta, nuestra Facultad de Ciencias Jurídicas.

Carolina Salas Salazar.