Actividad fue organizada por el programa de Magíster en Derecho de la UCN.
Destacados especialistas se dieron cita en el seminario “Tribunal Constitucional y nueva Constitución”, actividad organizada por el programa de Magíster en Derecho de la Facultad de Ciencias Jurídicas de la Universidad Católica del Norte (UCN) y patrocinada por el Colegio de Abogados de Antofagasta.
En la instancia, expusieron Francisco Sanz, profesor de la Escuela de Derecho de Antofagasta de la UCN y director del programa de Magíster en Derecho; Marisol Peña, académica de la PUC y exministra del Tribunal Constitucional, y Jaime Arancibia, director del departamento de Derecho Público de la Universidad de Los Andes. El encuentro fue moderado por Pablo Schultz, profesor de la Escuela de Derecho de Antofagasta de la UCN.
Las palabras de bienvenida fueron entregadas por Javier González, director del Colegio de Abogados de Antofagasta y profesor de Derecho Público de la Escuela de Derecho de Antofagasta de la UCN, quien agradeció la participación de los expositores, y explicó la importancia del copatrocinio de la entidad en el seminario, “porque nos permite a todos y todas ir conociendo de primera fuente cuál es la unión de un tema que quizás hoy no está en el tapete, pero prontamente va a estar, cuando se empiece a discutir el fondo de los temas constitucionales, y va a traer posiblemente muchas réplicas”.
En primer lugar intervino Jaime Arancibia, quien explicó que cree que es muy difícil enfrentar cualquier discusión sobre un tema constitucional sin tener una mirada histórica, pero no para quedarse anclado a ésta, sino que para aprender de las experiencias del pasado y ver de qué modo se proyecta hacia adelante. Sobre esta base, realizó un breve repaso histórico sobre el Tribunal Constitucional (TC) y la justicia constitucional, para después decir cuáles son, a su juicio, las principales mejoras que se le podrían introducir al Tribunal Constitucional.
Respecto a los aspectos a mejorar en el TC, indicó que se trata de: designación de los ministros (requisitos y mecanismos), inaplicabilidad a Corte Suprema (oficio judicial), Nemo iudex sine actore en control preventivo, mitigar votos de prevención, estabilidad de los jueces o no renovación, eliminar dirimencia, resolver todas las contiendas de competencia, reducir el número de integrantes, y desincentivo a paralización de procesos
Por su parte, Francisco Sanz expuso acerca de los tribunales constitucionales de Suramérica, particularmente sobre el caso de la Corte Constitucional colombiana. En la instancia, detalló que, desde una perspectiva general, cuando se revisa la justificación de la defensa de una Constitución, uno puede identificar dos razones dentro del marco de esa defensa: en primer lugar, permite el respecto de las competencias de los órganos establecidos por la carta fundamental, y, en segundo lugar, determina el respeto de los derechos fundamentales, con el objeto de prevenir y eventualmente reprimir su incumplimiento, restableciendo la fuerza normativa y la supremacía de la Constitución. Ante la interrogante relativa a cómo se realiza defensa de la Constitución, explicó que a través de la jurisdicción constitucional.
Subrayó que en Colombia se estructura un control mixto de constitucionalidad, en el que participa la jurisdicción ordinaria y la Corte Constitucional. Este Tribunal en particular, explicó, ha sido valorado positivamente en su rol de defensa de la Constitución, en donde la ‘acción de tutela’ se configura en un mecanismo clave para la defensa de los derechos fundamentales. Detalló que se estima que el estudio de este mecanismo -y su vinculación a un futuro nuevo Tribunal Constitucional para Chile-, debe ser parte de la discusión dentro del marco de trabajo de la Convención Constitucional.
Finalmente, Marisol Peña expuso acerca de lo que fue experiencia en el Tribunal Constitucional por 12 años, incluyendo el ejercicio de la presidencia. Aseguró que sus palabras tienen además una dosis particular de emoción, porque una de las cosas que hicieron, y que, indicó, le produce un particular orgullo mirando hacia el pasado, fue por primera vez en su historia llevar el TC a las regiones.
Su presentación la dividió en tres puntos, donde, primeramente, hizo una referencia histórica desde la perspectiva concreta de la reforma constitucional de 1970, que en Chile produjo la instalación del primer Tribunal Constitucional en la historia republicana. Posteriormente, explicó el diagnóstico que viene desde la academia, y que, según explicó, se ha ido incubando a lo largo de este último tiempo, en torno a lo que podría ser la futura regulación del TC en una nueva constitución. En este punto, aludió especialmente a dos momentos: las propuestas de reformas constitucionales del Centro de Estudios Públicos del año 2016, y las 25 propuestas para el Tribunal Constitucional del siglo XXI, que fue una iniciativa en la que participaron 16 académicos de universidades de todo Chile, pensando en torno al Tribunal Constitucional del futuro.
Finalmente, entregó consideraciones para una regulación del Tribunal Constitucional en Chile, distinguiendo en materia de atribuciones o de competencia, versus otros aspectos que inciden en lo orgánico.
El registro completo de la actividad se puede revisar acá: https://bit.ly/2Xd7Mya